Muchos despiertan cada mañana y se miran al espejo tratando de darle explicación a los años que expresan su rostro o a aquellas marcas que definen su aspecto; muchos ven con cierta satisfacción cada facción de su cuerpo y se sienten con suerte o bendecidos; muchos otros ven con desagrado algo que para ellos esta demás o que les falta; cada quien sale a la calle con la inseguridad a cuestas o el exceso de confianza en ellos, muchos creen que están en las nubes y otros que están en el infierno; así cada quien trata de apelar a una salida de emergencia para poder apoyarse sea cual sea su dilema; mientras que los que se sienten llenos de confianza por su aspecto recorren las calles como si el que menos fuera a mirarl@s, los que se sienten menos tratan de esbozar una sonrisa y ser siempre l@s buena gente en cualquier lugar donde se encuentren con el fin de encajar por su personalidad.
Estos son dos polos opuestos de un mismo problema; la NECESIDAD DE ACEPTACIÓN SOCIAL.
Existe un gran porcentaje de personas que viven en función a los que les diga su entorno, que viven siempre alertas de las cosas que la sociedad hable de ellos y prefieren siempre en todo momento tener una actuación conforme a lo que su publico les exige, si se vuelven materialistas y hedonistas es solo porque de esa forma se sienten seguros porque la gente a su alrededor les dice que se ven bien de esa forma o de tal forma; mientras que quienes se dejan llevar por las opiniones ajenas respecto a su comportamiento siempre están buscando los tips necesarios para encajar en cualquier conversación o para poder tener siempre lo ultimo en las novedades de este mundo que gira locamente, todo con el fin de ser reconocidos como personas superiores y/o mejores.
Cada quien va buscando el escudo que mejor se le de para afrontar la lucha desigual de seres pequeños y subnormales contra el gran monstruo que para ellos representa la sociedad.
Pero se olvidaron de una sola cosa; que la sociedad esta compuesta de individuos con temas convergentes, que no estamos aquí para ser parte de un rebaño de clones; que no tenemos que medirnos todos en la misma regla; porque si hubiésemos sido hechos para parecernos en todo entonces hubiésemos salido en serie y tendríamos nuestro código de barras en la nuca(como en alguna peli); somos personas que necesitamos saber que somos especiales; todos lo somos, mas allá de cualquier rasgo físico o posición social o nivel intelectual o inclusive mas allá de cualquier nivel espiritual todos somos especiales y cada quien tiene que superarse a si mismo en base a dejar a un lado sus propios miedos y limitaciones, no tenemos por qué estar siguiendo a los demás y asumir los problemas ajenos, una cosa es tener algo en común y otra muy diferente querer ser igual a otra personas.
Lo único que nos generara el vivir acorde al sistema y sus crueles reglas será siempre decepcionarnos y caer de zanja en zanja; es bueno congeniar con las personas pero no es bueno cuando la única preocupación de tu vida es tener que congeniar.
Lo ideal es tener metas, a corto mediano y largo plazo, cumplirlas paso a paso, sabiendo afrontar las dificultades y no dejándose llevar solo por las apariencias, sean estas fiscas o almáticas.
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