No era un joven como cualquier otro, era un joven
atormentado, escondido bajo una capa de miedo y resignación; escondido en una
mascara de dureza e indiferencia; pero por dentro estaba muriendo lentamente
sin cura alguna; padecía de una enfermedad mortal: la desesperanza.
Por mucho tiempo había procurado encontrar un motivo para
vivir, se propuso alcanzar metas muy altas para su vida, pero poco a poco fue
cayendo en cada intento; y a cada caída las heridas eran mas profundas, y a
cada caída su pensamiento se hacia mas oscuro; era un joven que aparentaba ser
como muchos pero por dentro no era mas que un guiñapo sin ilusiones,.
Decidió un día ir hasta un acantilado y lanzarse hacia la oscuridad
eterna; mas cuando alzo la vista al cielo pudo ver una pequeña luz en medio de
las tinieblas, las nubes grises casi rojizas de un atardecer dejaron entrever
una pequeña luz, tan pequeña que parecía ser solo una ilusión pero que le
dieron a el la razón suficiente para declinar en su intento.
Creyó por un instante que esa luz era un símbolo de la
esperanza que todos guardan dentro de si, aun en medio de cualquier problema,
existe siempre una posibilidad de hacer las cosas diferentes y de poder hallar
la luz de un día a pleno sol en nuestras vidas. Él se creyó esas palabras y
bajo en busca de un nuevo reinicio, retomo sus caminos y procedió a escalar nuevamente
en busca de sus metas, pero una vez el miedo lo invadió y se dejo caer. Hallándose
casi al borde del abismo nuevamente: decidió esta vez dejar de lado sus deseos y se volcó a cubrir
la heridas ajenas hizo de los demás su forma de hallar una cuya para si mismo tal
vez de manera egoísta procuro primeramente ayudar a otros para ayudarse a si
mismo, sacrificar lo que no tenia por la sonrisa ajena, y decidió abrir su corazón
en busca de aceptación y de unas migas de cariño.
Pero el mismo se desengaño, el mundo no era ni será como el
espera que sea y entonces llevado una vez mas por la tristeza y la decepción decidió
caminar con el rumbo mas seguro que ha seguido siempre: la oscuridad.
El camino hacia las sombras siempre es el mas fácil de tomar
aunque también sea el mas difícil de recorrer, mas el esta ahí dispuesto a
hacerlo, con el fin de demostrar que no existe cosa material que pueda interponerse
en una determinación firme; con el fin de hacer ver que las apariencias engañan
y que uno pude hacerse de un juicio por lo que tiene una persona o por como es
aparentemente una persona pero nunca podrá ver lo que lleva en el corazón; y
que existen heridas tan profundas y enfermedades tan penosas que como el cáncer
van matando lentamente el alma, aunque nadie pueda ver los síntomas a simple
vista.
Ahora le quedan 310 días de vida, y el se ha puesto en la
mente la firme idea de tomar el control de su vida y si es que no pudo escoger
el momento de nacer ni el lugar; si no pudo escoger las circunstancias que lo
obligaron a tomar esta decisión; hay algo que si podrá escoger y el momento de
dejar este lugar y la forma en la cual quiere adentrarse en los brazos de la
parca.....
Solo quedan 309 días….
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